sábado, 16 de junio de 2012
Realismo Literario
El realismo literario es una corriente estética que supuso una ruptura con el romanticismo, tanto en los aspectos ideológicos como en los formales, en el tercio central del siglo XIX.
El origen del término es francés: aparece aplicado a la literatura hacia 1825 para referirse a la imitación por parte de los románticos de la naturaleza y al detalle descriptivo de algunos de sus novelistas. Más tarde, su significado se precisó para aplicarse a ciertos pintores como Gustave Courbet que, frente a los temas grandilocuentes y las escenografías aparatosas del Romanticismo, llevaban a sus lienzos sencillas escenas de la vida cotidiana; enseguida se aplicó el vocablo a las obras literarias animadas de un propósito análogo de recoger fieles testimonios de la sociedad de la época.
Hacia 1850 en Francia una serie de escritores y críticos presentan ya al realismo como una nueva estética alejada u opuesta a la romántica. En 1856 aparece una revista titulada precisamente Réalisme, que en uno de sus números dice:
“El realismo pretende la reproducción exacta, completa, sincera, del ambiente social y de la época en que vivimos... Esta reproducción debe ser lo más sencilla posible para que todos la comprendan”.
Caracteríticas:
• Procura mostrar en las obras una reproducción fiel y exacta de la realidad.
• Se opone al romanticismo en su rechazo de lo sentimental y lo trascendental; aspira, en cambio, a reflejar la realidad individual y social en el marco del devenir histórico.
• Hace un uso minucioso de la descripción, para mostrar perfiles exactos de los temas, personajes, situaciones e incluso lugares; lo cotidiano y no lo exótico es el tema central, exponiendo problemas políticos, humanos y sociales.
• El lenguaje utilizado en las obras abarca diversos registros y niveles de lenguaje, ya que expresa el habla común y se adapta a los usos de los distintos personajes, que son complejos, evolucionan e interactúan influyendo en otros.
• Las obras muestran una relación mediata entre las personas y su entorno económico y social, del cual son exponente; la historia muestra a los personajes como testimonio de una época, una clase social, un oficio, entre otros.
• El autor analiza, reproduce y denuncia los males que aquejan a su sociedad.
• Transmite ideas de la forma más verídica y objetiva posible.
Los Temas
Principalmente están derivados de la mentalidad burguesa: el poder, el dinero, la influencia social o las cuestiones políticas del momento.
Los Personajes
Reflejan los cambios y tensiones sociales, aparecen proletarios, mendigos, políticos y la clase media.
La Novela realista
Durante la segunda mitad del s. XIX se desarrolla una prosa periodística, la llamada prensa obrera, cuenta las tensiones sociales de la época. Más tarde florece la prosa científica y humanística, pero el verdadero esplendor de este género se da con la novela.
En la novela se consiguió dar una visión completa de la sociedad en un determinado tiempo histórico: los personajes, los ambientes, los problemas,… formando un mundo verosímil y cotidiano. El novelista se convierte en el portavoz de la conciencia colectiva, consiguiendo una buena conexión entre novelista y sociedad.
Características de la Novela Realista:
• El tema principal de la novela es el conflicto entre el individuo y la sociedad. Se intenta conocer el motivo de la marginación del personaje dentro de la sociedad.
• El centro de la novela es el personaje, que reúne y expresa los rasgos generales de su grupo social. Se consigue un retrato casi perfecto del personaje, no solo físico sino también moral; utilizando las técnicas de exploración del alma humana como el monólogo interior y el estilo indirecto libre.
• Hay una variada pintura de ambientes, principalmente costumbristas; reuniones en casinos, paseos callejeros, culto religioso, fiestas populares, etc.
• Es una representación total de la vida, eliminando lo fantástico. El autor muestra las miserias e intereses humanos de la época, convirtiéndose en crítico y juez, intentando mejorar la sociedad.
• El tema principal de la novela es el conflicto entre el individuo y la sociedad. Se intenta conocer el motivo de la marginación del personaje dentro de la sociedad.
• El centro de la novela es el personaje, que reúne y expresa los rasgos generales de su grupo social. Se consigue un retrato casi perfecto del personaje, no solo físico sino también moral; utilizando las técnicas de exploración del alma humana como el monólogo interior y el estilo indirecto libre.
• Hay una variada pintura de ambientes, principalmente costumbristas; reuniones en casinos, paseos callejeros, culto religioso, fiestas populares, etc.
• Es una representación total de la vida, eliminando lo fantástico. El autor muestra las miserias e intereses humanos de la época, convirtiéndose en crítico y juez, intentando mejorar la sociedad.
Algunos escritores Realistas:
En francia:
Henri Beyle Stendhal,
Honoré de Balzac
Gustave Flaubert.
En el Reino Unido:
Charles Dickens;
En Rusia:
León Tolstói.
Fiódor Dostoyevski.
En Estados Unidos:
Mark Twain;
En Chile:
Alberto Blest Gana.
En España:
Benito Pérez Galdós.
Leopoldo Alas Clarín.
Emilia Pardo Bazán.
En Portugal:
Eça de Queiroz.
En Italia: el movimiento se denominó verismo y tiene a su más caracterizado representante en:
Giovanni Verga.
En cuanto a la literatura escrita en alemán, es un movimiento de este sesgo el llamado Biedermeier y pueden considerarse realistas los novelistas
Friedrich Hebbel (dramaturgo).
Theodor Storm.
Theodor Fontane.
Gustav Freytag.
Wilhelm Raabe.
En Suiza:
Albert Bitzius (que utilizaba el seudónimo Jeremías Gotthelf),
Gottfried Keller
Conrad Ferdinand Meyer
En Austria:
Adalbert Stifter
Aunque esta estética todavía continuó renovándose durante el siglo XX a través de la obra literaria de Thomas Mann.
Al final de su evolución, agotados sus presupuestos iniciales y sin variedad alguna ya sus obras artísticas, el realismo literario se descompone en diversas corrientes que renuevan sus principios, bien seleccionando y desarrollando una de sus ramas, bien exagerándolos, bien rehuyéndolos y adoptando los principios opuestos, bien contaminándolos y mezclándolos con los principios opuestos. La novela psicológica desarrolla una rama del realismo: agotada la descripción física y material de los entornos, el novelista se centra en los personajes, cuya psicología es lo único ya que le interesa y se fuerza en reconstruir mediante técnicas como el monólogo interior. En segundo lugar, exagera y sistematiza sus principios el naturalismo, cuyos presupuestos expone el escritor francés Émile Zola hasta el punto de reducir la novela a un documento social, a una instantánea. Rehúye los principios del realismo el espiritualismo, al cual le interesa todo aquello que detesta el realismo: la religión, el espíritu, el alma de las personas, lo tradicional, lo campesino... A esta corriente llegan al final de su periplo realista escritores como Tolstoy y Galdós. Por último, mezclan realismo y romanticismo los escritores del posromanticismo.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario